jueves, 29 de diciembre de 2011

Vacaciones para trabajar.

Bueno, he estado un poco ausente unos días. No porque no tuviera mucho que contar, más que nada porque mi vida ha sido un continuo vaivén de tareas relacionadas con la asociación y de festividades un tanto odiadas por mi...

Intentaré hacer un resumen breve de lo que ha sido mi vida en estos días que llevo sin entrar, más que nada para llevar un control en este caos organizado que es mi vida.

El día 23 fui tomado por inocente tres veces seguidas, lo que a la tercera vez, generó una rabieta de niño pequeño en mi, enfuruñandome todo el día y manteniendo que la Pelirroja y Culo eran unas pesadas y unas malas personas por lo que me habían hecho... aunque me duró solo el tiempo de llorar y decir "quiero a mis dos pulgas pesadas dandome la lata"...

El día 24 fue una larga (y horrible) cena en casa de mis abuelos maternos. Posteriormente, y tras una serie de catastróficas desdichas (familiares muertos, familiares descastados y perros atropellados) acabé en casa de Fran jugando al Singstar. No sé porqué me meto en estas cosas, si sé que jugando con los que jugaba iba a acabar hundido. Todos son expertos cantando comparados conmigo, que parezco una de esas hurracas otoñales que sueltan graznidos que parece que alguien las está matando lenta y dolorosamente. El resultado fue una depresión de caballo...

El día 25, por el contrario, fue una estupenda cena en casa de mis abuelos paternos al lado de mi prima mientras esperaba impaciente las doce, hora a la que había quedado de nuevo. Una bonita noche jugando a Lobos sin mayor percance que un triple asesinato generado por una bruja enrabietada, unos lobos muy asquerosos y un cazador algo olvidadizo...

El día 26 lo pasé entre niños a los que más les valdría perder las piernas. Despues de horas y horas jugando a esos juegos que preferiria haber guardado en mis recuerdos... acabé tirado en mi cama, con los pies llenos de callos y con un olor a estiercol de cerdo en plena tarde de agosto...

Increiblemente, el día 27 representa un enorme hueco oscuro en mi memoria, ya que no recuerdo nada de lo que hice.

En cuanto a ayer... ¡¡cumplí 10 bonitos meses con Fran!! Si, parece poco, pero por algo se empieza. No intentes construir un edificio por la azotea...

O como sea... La cuestión es que como se puede observar, mi vida sigue siendo un continuo pelmazo de sucesión de días que no parece tener fin. Pero en esta pelmazo de vida... estoy bastante agusto. No cuento con todo lo que querria tener. Pero si cuento con algunas personas que me hacen ameno este viaje hacía la muerte.

Filosofico y potántico a la vez...

No hay comentarios:

Publicar un comentario